Primera Sesión Gratuita

Un mal consejo

Respetar la libertad del otro… para poder ser tú

A veces aparece una verdad incómoda en nuestra vida:
somos libres, sí, pero nuestra libertad termina donde empieza la del otro.

Y justo ahí, en esa línea tan delgada, empiezan muchos de nuestros conflictos.

¿Encuentro… o choque?

Cuando dos seres humanos se encuentran, pueden pasar dos cosas:
puede comenzar una lucha o puede comenzar un baile.

Y en muchas relaciones, ambos se alternan.
¿Por qué?
Porque hay algo en juego.

¿Qué se pone en juego cuando nos relacionamos?

A veces queremos tener razón.
A veces queremos dominar.
A veces simplemente deseamos que el otro sea como yo quiero que sea.

Y eso es peligroso.

Porque transformamos al otro en un espejo de nuestras expectativas,
y dejamos de respetar su derecho a ser quien es.

El impulso de cambiar al otro (y su origen)

Por extraño que parezca, el primer impulso en muchas relaciones no es aceptar, sino corregir.

Ese impulso tiene raíces profundas.
Desde pequeños, muchos hemos aprendido que debemos ser como otros quieren que seamos,
aunque esas expectativas vengan cargadas de amor:
«Lo hago por tu bien.»
«Quiero que seas feliz.»

Pero hay un problema: la felicidad no se encuentra en cambiar lo que eres.
Se encuentra en poder ser tú, con autenticidad, con permiso.

¿Y si dejaras de corregirte y empezaras a escucharte?

De adultos repetimos ese patrón con nosotras mismas:

  • Me siento triste… y no quiero estarlo.
  • Me enfado… y no me lo permito.
  • Me enamoro… y reprimo mi ternura.

¿Y si el primer paso no fuera cambiar, sino aceptar?
¿Y si dejaras de intentar modificarte para «ser feliz», y empezaras a preguntarte quién eres realmente?

En Gestalt no damos consejos

Porque ningún consejo puede sustituir el descubrimiento personal.
Porque solo tú sabes lo que necesitas.

Lo que sí hacemos es ofrecerte un espacio para mirarte, escucharte, y empezar a amar quién eres de verdad.
Con tus luces.
Con tus sombras.
Con todo lo que hay en ti.

¿Estás lista para dejar de corregirte?

Si ha llegado el momento de dejar de luchar contra ti y empezar a habitarte con autenticidad,
las sesiones de counselling Gestalt pueden acompañarte.

¿Quieres seguir explorando?

Si este tema resuena contigo, quizá te interese abrir un espacio para hablarlo en sesión. Cada proceso es único, y puede ser útil parar, mirar y ponerle palabras a lo que estás viviendo.

Duración habitaul:

60 min.

Modalidad:

Terapia Gestalt

Enfoque:

Presencial u online

Primera sesión:

Gratuita

Más entradas